lunes, 1 de diciembre de 2008

Insensatamente te extraño, o tal vez, solo me preocupas.
En ambos casos pienso en ti...
Busco explicaciones, busco razones, busco justificaciones y solo encuentro culpas.
Se resiste el corazón a aceptar esta traición... Se agota la paciencia de mi razón.
Finalmente y como siempre entrego mas de mi que lo que sueltas de ti.
Busco partir de nuevo en complicidad con mis miedos por huir, con la certeza de que aunque me extrañes no lucharas por retenerme, nunca los has hecho, no pasara. Aun con el paso de los años alimento la esperanza de que finalmente, un soleado día estes al otro lado de las vías en la estación del tren y me pidas desesperado que me quede, que no eres tu sin mi...
Finalmente el tren partirá, ire sentada observando por la ventanilla como se aleja mi deseo irrealizado, pues no termino de entender que nunca fui suficiente motivo para ti...
...¿acaso es amor?

1 comentario:

Anónimo dijo...

eres suficiente motivo....muchomuy suficiente ...queel sea pendejo es otra cosa....hoz.